†
IN MEMORIAM
Mons. MARIO MARINI
(1936-2009)
R.I.P.
Según informa el blog Rorate coeli (http://rorate-caeli.blogspot.com/), esta mañana del día de María Auxiliadora ha fallecido en Roma monseñor Mario Marini, secretario de la Pontificia Comisión Ecclesia Dei desde marzo del año pasado, cuando el Su Santidad papa Benedicto XVI lo promovió a este puesto ocupado hasta entonces por monseñor Camille Perl, a su vez ascendido a vice-presidente de este mismo dicasterio.
Monseñor Marini era originario de Cervia en la provincia de Ravenna (Romaña), donde había nacido el 13 de septiembre de 1936. Se doctoró en Ingeniería Civil por la Universidad de Bolonia antes de sentir el llamado al sacerdocio, cuyo camino emprendió en los años sesenta, en pleno concilio ecuménico. Una vez ordenado fue a México, donde permaneció dos años como misionero, atraído por el catolicismo de ese país, al que había aprendido a admirar gracias a su amistad con seminaristas mejicanos del Colegio Pío Latinoamericano de la Via di Torre Rossa.
A su regreso de tierras americanas entró en la Curia Romana, sirviendo sucesivamente como oficial en la Secretaría de Estado, como jefe de despacho en la Congregación para el Clero y como subsecretario de la Congregación para el Culto Divino y la disciplina de los Sacramentos. El 7 de julio de 2007, el mismo día de la publicación del motu proprio Summorum Pontificum, Su Santidad el papa Benedicto XVI lo nombró subsecretario de la Pontificia Comisión Ecclesia Dei, sin duda por recomendación del cardenal Castrillón Hoyos, bajo cuyas órdenes había estado cuando éste era prefecto de la Congregación para el Clero.
En el desempeño de su cargo en la Congregación para el Culto Divino, por la misma época en la que fue prefecto de ella el cardenal Medina Estévez, monseñor Mario Marini se distinguió como defensor del derecho de los fieles a recibir la comunión hincados de rodillas, contra la práctica abusiva muy extendida entre los sacerdotes de obligar a éstos a ponerse de pie para comulgar y negándosela en caso contrario (cfr. http://www.corazones.org/doc/comunion_rodillas.htm). En la Pontificia Comisión Ecclesia Dei siempre fue un amable interlocutor, bien dispuesto y sincero amigo de la Tradición.
Como dato curioso, consignamos que a monseñor Marini se lo conocía como “el tercer Marini” para distinguirlo de sus colombroños el arzobispo Piero Marini (actual responsable de la organización de los Congresos eucarísticos) y monseñor Guido Marini, sucesor del primero como ceremoniero pontificio.
Monseñor Mario Marini era canónigo del capítulo de la Basílica de San Pedro. Que descanse en paz y haya premiado Dios su buen hacer.
A su regreso de tierras americanas entró en la Curia Romana, sirviendo sucesivamente como oficial en la Secretaría de Estado, como jefe de despacho en la Congregación para el Clero y como subsecretario de la Congregación para el Culto Divino y la disciplina de los Sacramentos. El 7 de julio de 2007, el mismo día de la publicación del motu proprio Summorum Pontificum, Su Santidad el papa Benedicto XVI lo nombró subsecretario de la Pontificia Comisión Ecclesia Dei, sin duda por recomendación del cardenal Castrillón Hoyos, bajo cuyas órdenes había estado cuando éste era prefecto de la Congregación para el Clero.
En el desempeño de su cargo en la Congregación para el Culto Divino, por la misma época en la que fue prefecto de ella el cardenal Medina Estévez, monseñor Mario Marini se distinguió como defensor del derecho de los fieles a recibir la comunión hincados de rodillas, contra la práctica abusiva muy extendida entre los sacerdotes de obligar a éstos a ponerse de pie para comulgar y negándosela en caso contrario (cfr. http://www.corazones.org/doc/comunion_rodillas.htm). En la Pontificia Comisión Ecclesia Dei siempre fue un amable interlocutor, bien dispuesto y sincero amigo de la Tradición.
Como dato curioso, consignamos que a monseñor Marini se lo conocía como “el tercer Marini” para distinguirlo de sus colombroños el arzobispo Piero Marini (actual responsable de la organización de los Congresos eucarísticos) y monseñor Guido Marini, sucesor del primero como ceremoniero pontificio.
Monseñor Mario Marini era canónigo del capítulo de la Basílica de San Pedro. Que descanse en paz y haya premiado Dios su buen hacer.
Desde México, Pedro Rguez. Ocampo, unido en oraciones por el querido Monsr. Marini.
ResponderEliminarEl siempre creyó en el efecto salvador del Santo Sacrificio de la Misa.
ppedro1o@yahoo.es